domingo, 31 de octubre de 2010

¡Halloween!

¡Saludos, batcavers! Pues como todos sabemos, hoy es 31 de octubre, día (o noche de) Halloween, la noche más oscura del año, así que hacemos una breve pausa en los post del blog para regresar el domingo que viene con más de lo mismo.

Hoy, más que nunca, es un día perfecto para escuchar rock gótico, o deathrock, aunque todos los días son buenos para escuchar esta música maravillosa.

Sin más, os dejamos con la canción perfecta para hoy: "Halloween", de Siouxsie and The Banshees.
¡Que la disfrutéis! Y nos vemos en noviembre.


domingo, 24 de octubre de 2010

Cien Años

¡Bienvenidos de nuevo a la Cueva! Esta semana la dedicaremos a una banda de la que hace tiempo quiero hablar, pero no encuentro, digamos "palabras" para hacerlo. No es porque me fascinen, entendedme, sino porque no encuentro artículos e información que me guste acerca de ellos para escribir un post en condiciones.
Así que supongo que tendré que limitarme a contaros un poco su biografía, mezclada, como siempre, con un poco de mi opinión personal aquí y allá.
Se trata, sí, de The Cure, una de esas bandas excepcionales que tocan muchos estilos musicales sin aferrarse totalmente a ninguno. Decir de The Cure que son pop, o rock gótico, es, simplemente, quedarse muy cortos.
Si bien es verdad que nunca se han ganado realmente la etiqueta de "góticos" (al menos no puramente), sí es cierto que es una de esas bandas que todo amante de la música gótica termina escuchando tarde o temprano.
En mi caso, fue algo singular. Hace tiempo que los conozco sólo de oídas, y sí había leído que son muy buenos, pero siempre retrasaba el momento de escuchar algo de ellos porque decía "bah, seguro que no me gustan". Grave error por mi parte. Más tarde, y por curiosidad, me decidí finalmente a escuchar algo de su música y quedé, sencillamente, encantada. A día de hoy, es otro de mis grupos favoritos, al menos en lo que respecta a su primera etapa de carrera.

Pues bien, la banda empezó llamándose Easy Cure y nació en un colegio de Crawley, una ciudad construida sobre los escombros que dejó la guerra en un pequeño pueblo en el corazón de la campiña del sur de Inglaterra. Aunque Easy Cure había surgido como una banda de punk, para cuando simplificaron su nombre a The Cure, la creciente fascinación de Robert Smith (vocalista) por los temas oscuros y opresivos, ya se había unido a su habilidad para canalizar esas ideas en canciones apasionadamente evocadoras, y fue eso lo que hizo que su primer álbum Three Imaginary Boys fuera catalogado como algo muy diferente a los típicos trabajos punk de aquellos días. No hemos de extrañarnos por esto, pues ya a estas alturas sabemos de sobra que incluso en los mismos tiempos del punk surgieron bandas que ya se distanciaban de este estilo de música, adoptando tonos más oscuros propios de lo que posteriormente se llamaría rock gótico.

El segundo álbum, Seventeen Secons (1980), confirmó lo que los críticos ya habían advertido - The Cure estaban ahí para quedarse. Su tercer álbum, sin embargo, derrumbó todas las expectativas.
Faith, según los parámetros de la industria de la música de principios de los 80, era practicamente un intento de suicidio. Era un disco de introspec
ción mórbida y ensimismamiento, donde cada una de las desesperadas canciones estaba obviamente diseñada para destrozar la frágil sensibilidad de los programadores de radio (da gusto leer cosas así, lo digo en serio). Digamos, pues, que la banda comenzaba a asestarse puñaladas a sí mismas.
No obstante, que conste que estos primeros álbumes son mis favoritos.
Cuando el cuarto álbum, el sombrío Pornography de 1982, se convirtió en el primer álbum de The Cure que entraba en el Top Ten Británico.

En julio de 1983, The Walks se colocó sin esfuerzo en el Nº 12 en el Reino Unido, seguido de un éxito incluso mayor, The Lovecats. Un nuevo álbum, extraño y sin concesiones, The Tops, lleno, según dicen, de enormes cantidades de ‘setas mágicas’.

Smith sustituyó a Tolhurst en The Cure en febrero de 1989, antes de la publicación de Disintegration. El sello lo consideraba como algo casi invendible. O, en palabras de Smith, «Yo pensaba que era nuestra obra maestra, y ellos creían que era una mierda». El disco se colocó en el Nº3 en el Reino Unido y entrando en el Top 20 americano por primera vez, allí ganó otro disco de platino.
Aunque la banda mantenía un perfil relativamente bajo al comenzar la década de los 90, 1991 les trajo un Premio BRIT al Mejor Grupo Británico y en mayo de 1992, el álbum Wish hizo su debut en el Nº1 del Reino Unido y el Nº2 de USA.

1993 se lanzan los directos, Show y Paris. Smith se centra en el proceso judicial que había abierto Lol Tolhurst, quien reclamaba, derechos sobre el nombre de la banda. El Tribunal Supremo de Londres dictó sentencia en contra de Tolhurst en septiembre de 1994.


O’Donnell, Thompson y Williams habían continuado avanzando desde el comienzo de la década y la participación de Simon empezaba también a fluctuar. En mayo de 1996 sale Wild Mood Swings, el anterior roadie de The Cure, Perry Bamonte se puso a la guitarra, Jason Cooper había reemplazado a Boris a la batería y Roger O’Donnell fue persuadido para que se reuniera a la formación.

Se embarcaron en su mayor gira de todos los tiempos, actuando en más de 100 conciertos ante multitudes extasiadas en los estadios más prestigiosos del mundo. A la gira le siguió un nuevo recopilatorio en 1997, Galore.

Bloodflowers(2000) es Nominado a los Grammy, es un logro del que Smith se siente particularmente orgulloso, el tercer capítulo de la Oscura Trilogía, junto con Pornography y Disintegration.

The Cure llevó a cabo el concierto más ambicioso de su carrera en el Tempodrom de Berlín, con la trilogía oscura al completo, en directo y durante más de tres intensas horas. En la primavera de 2003 se publicó el DVD/Vhs Trilogy para el regocijo universal.

Publicaron el set de 4 CD, Join the Dots, a primeros de 2004. Un encantador compendio de caras B, difíciles de encontrar, rarezas y remixes que preparan el camino para ese salto hacia delante que representa su último trabajo - The Cure.

Convencido por Ross Robinson, Smith vuelve a confiar en The Cure, cuando todo apuntaba a una separación y un disco en solitario. Así en 2004 es el momento de un nuevo disco de estudio The Cure.

En mayo de 2004 The Cure firmaron un contrato global de tres discos con Geffen Records.

domingo, 17 de octubre de 2010

Perdiendo el control

¡Saludos y bienvenidos una vez más a nuestra cita semanal! Si bien es cierto que la semana pasada no me encontraba con muchas ganas de escribir un post en condiciones, hoy vuelvo con las pilas cargadas y dispuesta a ofreceros una entrada de verdad.
He de decir que, para mí, el hecho de llevar este blog ha pasado de ser un simple entretenimiento a convertirse casi en un hobby... sí, dedico parte de la semana a pensar sobre qué o sobre quiénes escribiré el próximo domingo, y también- aunque parte del artículo es improvisada- a madurar lo que escribiré.
Pues bien, como lo prometido es deuda y lo que yo prometo siempre lo cumplo, sería una falta por mi parte no hablar inmediatamente de esta banda.
Ya hemos estado en Londres e incluso en Madrid; hoy viajaremos a Manchester. Supongo que es una pista muy clara, ¿no? ¿Aún no lo habéis descubierto? Bueno, pues sin más dilación lo digo ya: hoy hablaremos de Joy Division.
Joy Division es una de esas bandas que, por suerte o por desgracia, llevan aparejado inevitablemente el fantasma de la muerte. Por suerte porque quizás gracias a la muerte de su vocalista, Ian Curtis, se han convertido en leyenda. Y por desgracia porque debido a este mismo hecho desconocemos cómo habría evolucionado la banda en caso de haber continuado.

El caso es que una de las cosas que más me han llamado siempre la atención de JD es que nacieron casi en pleno apogeo punk, aunque es cierto que ya hacia 1976 este tipo de música comenzaba poco a poco a declinar. Y, en lugar de conformarse con ser otra banda punk más del montón, se aferraron a un lirismo depresivo y unas melodías oscuras que los llevaron a crear prácticamente un nuevo género que más tarde se denominaría "Post-punk", origen del futuro rock gótico en los 80s.
Junto con Siouxsie and the Banshees, de los que ya hemos hablado, Joy Division suele ser reconocida como la primera banda post-punk en ganarse la etiqueta de "gótica" (siempre entrecomillas). Ya en 1979, la periodista de música Mary Hannon vinculó a los dos grupos en un movimiento post-punk descrito como "gótico del siglo XX". En una entrevista para promocionar el álbum debut de 1979 de Joy Division, Unknown Pleasures, Hannon comentó: "Una de las claves de Joy Division es el título de su álbum. Otra es la descripción que hizo Martin Hannet (productor de la banda), como "música para bailar, con dejos góticos". Sin quererlo, el guitarrista Bernard Albercht hizo una excelente descripción de "gótico" en nuestra entrevista, cuando describió su película preferida, Nosferatu, al decir que "la atmósfera es verdaderamente malvada, pero uno se siente bien allí".Una de las fotos de la banda que todos conocemos.


La marca distintiva de la banda, de su rock postmoderno y sombrío pero innovador, se denominó "death disco"; sus tonos desolados y sus introspectivas letras contrastaban fuertemente con su ritmo dance compulsivo, un contraste que algunos compararon con los ritmos oscuros de los Doors, en cuya música los temas se entrentan al ritmo acelerado.
La leyenda de Joy Division surgió y se quedó sólo en dos álbumes: Unknown Pleasures y Closer, su continuación de 1980. Peter Saville, responsable del aclamado diseño de la cubierta de ambos trabajos, considera a la banda como un producto de su desolado entorno, la lúgubre ciudad de Manchester, en el norte de Inglaterra. Manchester es una ciudad de pasajes subterráneos de cemento, con una catedral de estilo gótico.

Ian y Bernard, el guitarrista.


A primera hora del 18 de mayo de 1980, en vísperas de una gira por Estados Unidos que llevaría a Joy Division a la fama internacional, ocurrió la tragedia: el vocalista Ian Curtis se quitó la vida; se ahorcó, mientras un disco del álbum The Idiot, de Iggy Pop, sonaba en el plato. El suicidio de Ian Curtis fue doloroso y absurdo a la vez; de alguna manera, recordaba la tragedia del poeta decadente Gerard de Nerval, que un siglo antes había sido encontrado ahorcado con una cinta que, según había comentado orgulloso a sus amigos días antes, era una liga de la reina de Saba.
Estos dos excéntricos, en lucha con sus flaquezas, dejaron un documento artístico como legado que da testimonio de sus conflictos internos. Curtis le dejó al mundo, entre otras, su canción Love Will Tear us Apart, que exponía lúgubremente los enredos románticos que, para algunos, motivaron la acción desesperada del cantante; el tema pronto se convirtió en un clásico.
Como exclamó un artículo de Sleazenation en el año 2001,: "Como cantante principal de Joy Division, Ian Curtis lideraba la banda más importante de la generación post-punk. Como el fallecido cantante de Joy Division, Ian Curtis lideraba la mejor banda de rock and roll de todos los tiempos".
Ian Curtis, con esa imagen de filósofo existencialista que pasaría a la posteridad.

Sin lugar a dudas, su muerte generó un gran oleaje de comentarios. En un artículo de 1997, David Dorrell le comentó a Suzanne Colon: "Con su suicidio, Ian Curtis no solamente le puso fin a su propia vida y a la de la banda, sino que permitió que se formara un vacío al que llegaron corriendo las demás bandas". La muerte de Ian (permitidme llamarlo así, por familiaridad) demostró algo que era imposible de seguir. Le dio a todos los cantos fúnebres bailables de Joy Division una credibilidad instantánea, asegurándoles un lugar en los libros de la historia del rock. También les permitió a los seguidores entusiastas de la banda que mantuvieran la indulgencia romántica de especular con lo que habría podido ser si su ídolo hubiese superado sus escasos 23 años.

La locura se retorcía en el centro del maligno universo de Joy Division; el telón de fondo era el sombrío y decadente corazón industrial de Gran Bretaña, las fábricas y los sitios abandonados.
"Lo que embriagaba a Ian parecía ser la locura y el desequilibrio mental", reflexionó el guitarrista Albretch. "Dijo que un miembro de su familia había trabajado en un asilo psiquiátrico y que solía contarle cosas sobre las personas de allí: personas con veinte pezones o dos cabezas, y que eso le causó una gran impresión. Cuando Joy Division estaba formándose, él ocupaba parte del tiempo trabajando en un centro de rehabilitación para personas con dificualtades mentales o físicas que intentaban encontrar trabajo. Eso le afectó mucho".
Para muchos medios que se toman las cosas al pie de la letra, en el campo de la música decadente no puede haber un mejor honor para un músico depresivo que culminar su carrera con el suicidio.
Tumba de Ian en el cementerio de Manchester (algún día te visitaré, Ian, te lo prometo).


Por supuesto, la credibilidad póstuma de Joy Division estuvo cargada de inconvenientes; sobre todo para los compañeros de banda de Ian, que se encontraban al borde del éxito pero a la vez empañados por una tragedia que no debían explotar. Los miembros restantes permanercieron para formar una banda distinta con el nombre de New Order, que comenzó a desmentir esa asignación de "oscuro" a la banda. Al parecer, Ian era el único interesado por la oscuridad; de hecho, fueron estas obsesiones oscuras las inspiradoras del nombre Joy Division, tomado de la novela de Karol Cetinsky House of Dolls, que trataba sobre prisioneras de un campo de concentración obligadas a convertirse en prostitutas por sus carceleros nazis (de hecho, la banda ha sido varias veces catalogada de "pronazi", algo que ellos mismos, y yo también, desmintieron).

Tal vez no sea yo quién para decir esto pero, al menos, según mi opinión, Joy Division es una de las mejores bandas del mundo. Y no sólo para los fans de la música oscura, sino para los amantes de la música en general, que deberían darles una oportunidad. Es una verdadera pena que, a día de hoy, poquísima gente se acuerde de ellos y que, si preguntas a cualquiera quién fue Ian Curtis, lo más seguro es que te responda que no tiene ni idea. Pero claro, hoy día la música, la concepción de la misma, ha cambiado mucho, y ahora se fija la mirada en lo que "está de moda", en lo "último", y no en lo verdaderamente bueno. Y claro, quién va a recordar a una vieja banda de finales de los 70s y principios de los 80.
Ayer mismo, en LastFm, una nota de un desgracidado diciendo que Joy Division era una mierda, me partió el corazón. ¿Cómo puede alguien decir una cosa así? ¿Cómo puede alguien atreverse a pensarlo siquiera? Pues debemos recordar que, nos guste o no, Joy Division revolucionó la música en su momento y que, si no hubiera sido gracias a ellos, muchas bandas posteriores o actuales no habrían existido siquiera. En primer lugar, les debemos el nacimiento del rock gótico, algo que muchos fans de este tipo de música agradecemos sin duda. Y en segundo, su brillantez y la demostración de que incluso los temas más lúgubres tienen cabida en la música popular como la tienen en la poesía.


Videoclip póstumo de Atmosphere, uno de sus mejores temas.

Y qué decir de Ian Curtis, que para mí sólo puede describirse con un adjetivo: GRANDE. Siempre fue un hombre oscuro y atormentado (un "pre-gótico", si es que algo así existe), y su forma de bailar, según dicen extraída de sus ataques epilépticos, siempre será recordada.
Ian es uno de mis ídolos y, de hecho, ocupa uno de los primeros puestos en mis listas de personas admiradas. Es un personaje que me fascina poderosamente- tal vez por su atracción hacia la muerte y la oscuridad, y por mi identificación con estas mismas cosas.
Ian se ha convertido, con el paso del tiempo en un auténtico "poeta maldito" de la música moderna. 30 años y medio hace que lo perdimos y aún hoy sus seguidores lamentamos su muerte. Con su suicidio no sólo acabó con su vida, sino también con su talento.

Hace un año pude hacerme con el recopilatorio de 1995 Permanent, otro de esos discos que guardo con mucho celo entre mis favoritísimos. Sí, estas cosas me pierden irremediablemente. Todavía recuerdo cuando babeé al encontrar el vinilo de The Sky's gone Out de Bauhaus; disco que no pude comprar...



Escena final de la película documental sobre la vida de Ian "Control", dirigida por Anton Corbjin (al igual que el videoclip anterior). Juro que casi lloré al ver este final, aunque ya sabía lo que iba a ocurrir.

domingo, 10 de octubre de 2010

Reflexión: cómo han cambiado las cosas

Saludos, hoy hago un breve paréntesis en la publicación de post sobre bandas y demases para hacer una pequeña reflexión que, aunque posiblemente sea un poco tonta, la considero necesaria.
Más que una reflexión en sí, lo quiero dejar como una pregunta abierta para que cada uno piense y medite al respecto.
¿Han cambiado mucho las cosas desde los 80s en este ámbito?
Para mí, la respuesta es sí. Muchas cosas han cambiado en un sentido evolutivo, y han surgido nuevas ramas, nuevas perspectivas que enriquecen el movimiento y lo amplían. Todo en este mundo tiene que evolucionar, y al igual que progresan y cambian con el tiempo las lenguas, la historia, la tecnología, la ciencia, etc., también lo hacen las subculturas urbanas. Es algo natural y es algo inevibitable, por lo cual yo no creo que realmente esto haya desaparecido o "muerto" como muchos afirman.
Por otro lado, en cierto modo, todo también se ha corrompido mucho desde los inicios. Ahora todo es más superficial, más falso, más como una máscara, como un disfraz. Antes era una verdadera forma de vida, algo que te entusiasmaba y de lo que estabas orgulloso; ahora es sólo un "traje" que te pones cada fin de semana. Por eso yo tengo otro punto de vista distinto.
Además, ya no son muchos los que recuerdan a las viejas glorias de la música oscura. Es una pena ver lo que ahora se considera "gótico"...

En fin, eso es todo. Lo dejo aquí para que cada cual reflexione.

domingo, 3 de octubre de 2010

Quiero ser santa

¡Bienvenidos de nuevo a esta cita semanal con la música que nos gusta! Esta semana he estado, debo decirlo, bastante ocupada, pero he tenido tiempo suficiente para madurar el tema del post de este domingo y meditar suficientemente.
Y, si bien me debatí entre varios artistas sobre los que quería escribir hoy, llegué a la conclusión de que va haciendo falta por aquí un poco de producto español. Pues, aunque bien es cierto que el blog está dedicado al Batcave en particular, no quiero limitarme y prefiero hablar de la música oscura en general de esa maravillosa década de los 80.

Muchos seguro que a estas alturas ya habréis averiguado el tema de esta semana; otros ya lo habréis hecho nada más leer el título, y otros quizá necesiten que les refresquemos un poco la memoria o bien que les enseñemos cosas nuevas. Pero para eso estoy yo aquí :)
Pues hoy voy a tratar nada más y nada menos que de Parálisis Permanente, uno de nuestros grupos nacionales mejores y más destacados.
Antes que nada, debo decir que en aquellos tiempos, eso de "gótico" aquí en España no existía; el término correcto para designar al movimiento surgido, entre otros, de la Movida Madrileña es Siniestro. "Gótico" es una palabra anglosajona que no se importaría a nuestro país hasta mucho después.
Pues bien, Parálisis fue, casi sin dudarlo, una de las primeras formaciones íntegramente oscuras que aparecieron en nuestro país. Todo comenzó cuando Nacho Canut y Eduardo Benavente (dos ex-miembros de Alaska y los pegamoides) crearon un proyecto paralelo al que bautizaron con el nombre de Parálisis Permanente a comienzos de 1981.
Eduardo y Nacho llevaban las ideas muy claras sobre lo que querían hacer, es decir, divertirse y crear algo con lo que realmente se sintieran a gusto. De esta forma, y acompañados por Johnny Canut, el hermano de Nacho, se dieron cita en el local de ensayo de los Pegamoides.
Su debut como banda tendrá lugar en febrero del año 1981, donde el hermano de Eduardo, Javier Benavente, actúa como vocalista junto al resto del grupo para un puñado de personas en la sala El Jardín de Madrid. De hecho, la foto interior del CD recopilatorio "Singles y primeras grabaciones" nos muestra un fragmento de aquel momento tan emblemático.

El cambio de vocalista tendrá lugar por causa de la inexcusable cita con el servicio militar que todo español varón y mayor de edad tenía que cumplir durante los años ochenta (para los que no seáis de España y, por tanto, no sepáis a qué me refiero, podéis buscarlo en Google. Mi padre está cada dos por tres contándome sus batallitas de la "Mili"). Javier la estaba sufriendo en aquel momento, y eso le restaba tiempo de ensayo; tiempo que, cada vez más, la banda le exigía y él no podía ofrecer. Ante esta carencia Eduardo fue asumiendo cada vez más el papel de cantante y también de líder de Parálisis.
Benavente empezó a interesarse por el sonido de un grupo coétaneo muy influenciado por los sonidos oscuros de The Cure o Joy Division, llamado Gabinete Caligari. En aquellos tiempos, y teniendo en cuenta el tipo de música que estas bandas hacían, era muy difícil para Parálisis o Gabinete editar un trabajo con alguna discográfica. Es por eso que Eduardo y Javier barajan la posibilidad de autoproducirse un EP compartido con Gabinete Caligari que saldrá a la luz en 1982.

En 1982 se empieza a preparar lo que tiempo después será conocido como el primer y único LP de la banda, "El Acto", todo un ejemplo de gothic rock, y el disco más emblemático del panorama siniestro español (yo tengo la fortuna de poseerlo en formato CD; es uno de los discos a los que más cariño tengo).
Cabe citar también que Ana Curra entró a formar parte del grupo como miembro estable; ella también formaría junto a Eduardo un nuevo proyecto con el nombre de Seres Vacíos.
"El Acto" resultará muy atractivo por diversas razones, la primera de ellas es su lograda calidad compositiva y su genial sonido, que nada tiene que envidiar a las bandas más importantes del positive-punk y primer gótico de Inglaterra. El disco contiene joyitas como la que da nombre al álbum, y versiones como "Quiero ser tu perro" de los Stooges y el notable cover "Héroes" de Bowie. La segunda es su portada, en ella se aprecia alumbrada bajo una luz tenue a la pareja del momento. Benavente y Ana Curra posando frente a un candelabro, Curra con un pelucón de escándalo que solía utilizar en algunas de sus actuaciones y un atuendo un tanto sadomasoquista.
Portada de "El Acto"


El éxito sonreirá a Parálisis Permanente durante finales de 1982 y principios de 1983. Benavente empieza a seleccionar a otras bandas que se unen a la fiesta oscura de cara a la publicación de nuevos trabajos bajo su sello Tres Cipreses.
Los conciertos programados de Parálisis Permanente iban en aumento, y además consiguieron aaprecer en el programa Caja de Ritmos de Carlos Tena a principios de 1983 (en aquellos tiempos, cuando en nuestro país todavía se hacían programas sobre buena música y no la basura televisiva que hay ahora). Le seguiría la edición de su último trabajo, "Nacidos para dominar"/"Sangre". Poco después y con motivo de la presentación del programa de Paloma Chamorro "La Edad de Oro", registraría una actuación en directo que no fue seleccionada para la emisión, y que quedaría comp rueba piloto.

De camino a Zaragoza con motivo de la actuación en un festival en el que tocarían con varias bandas, el 14 de mayo de 1983, el Seat Ronda que conducía Ana Curra sufre un accidente por causa de la acusada lluvia, haciendo que Eduardo fallezca en el acto con tan sólo 20 años de edad. Eduardo es enterrado en el cementerio del barrio de Carabanchel, en Madrid. Ante su pérdida, el grupo se descompondrá irremediablemente. Finalmente, Ana decide proseguir con Seres Vacíos, proyecto con el que editará tras la muerte de Eduardo un segundo trabajo, en el que en su corte "Luna Nueva" se escucha la voz del para siempre líder de Paralísis Permanente.
Una de mis fotografías favoritas de Eduardo


Qué decir de Parálisis, si realmente es mi grupo español favorito. Todo lo que dijera sería poco: maravillosos, únicos, irrepetibles, y aún podría alabarlos mil veces más. Eduardo es, para mí, uno de esos personajes inmortales a los que de vez en cuando añoro y echo de menos... y, por supuesto, lamento muchísimo su muerte, que incluso a mí, que no lo conocí, me duele. Quién sabe hasta dónde podría haber llegado la banda si él hubiera seguido con vida. Descanse en paz.



Videoclip de "Autosuficencia", el único que llegó a grabar la banda.